SOBRE EL INVENTOR DEL THERMIE, EL DR. ITO:
LA HISTORIA DE UN INCONFORMISTA
El Dr. Ito nació en 1883 en Iclinomia ( Japón ) en el seno de una familia tradicionalmente médica. creció envuelto en un ambiente de terapias orientales ( ejercitadas por sus familiares ) y se especializó en psiquiatria en 1907, por la universidad de Tokio. A principios de siglo todo Japón se acercaba a la cultura occidental. La medicina no era una excepción.
Mientras investigaba y trabajaba en un hospital crecia su frustración por las limitaciones de la medicina moderna.
«La medicina actual no busca la curación completa, sino que trata sólo los síntomas de las enfermedades».
-En 1910 el Dr. Ito renunció a la comodidad del hospital para dedicarse a la investigación. Su búsqueda era curar completamente sin provocar efectos negativos en el cuerpo.
-En 1913 abrió su primera clínica privada en su ciudad natal, sin embargo sus dudas eran cada vez mayores. No tenía confianza en la medicina que había aprendido.
-En 1915 deja la clínica con el claro objetivo de crear una nueva terapia según sus ideas.
Su investigación comenzó con el estudio de los clásicos de la medicina oriental, centrándose posteriormente en una terapia basada en la moxibustión tradicional. Dicha técnica estaba más evolucionada en Japón que en China ( cuna de la medicina tradicional).
Los logros terapéuticos de la moxibustión, eran espectaculares pero tenían efectos negativos ( dolor ) y efectos secundarios preocupantes ( quemaduras, ampollas, eccemas… ). Estos efectos fueron comprobados por el Dr. Ito en más de 40.000 personas, durante varios años.
El Dr. Ito encontró la clave del problema interpretando un fenómeno que observó un día, meditando en casa,» el humo del incienso se alargó, desdoblándose en siete colores, luego me envolvió sin quemarme».
Los siete colores le inspiraron a profundizar en los elementos constitutivos del incienso. Primero estudió los libros clásicos de aroma terapia japonesa, para saber las propiedades de cada planta, hierbas y árboles.
Su búsqueda se centraba en dos factores el aroma y el tipo de calor.
La artemisa ( la base de la moxibustión) le parecía limitada. El Dr. Ito buscaba algún elemento más.
Para encontrar la fórmula exacta («satisfacer a pacientes y consolar el corazón de los enfermos») debía antes solucionar el
tipo de calor.
El buscaba un tipo de calor/radiación suave, agradable y al mismo tiempo, penetrante.
«Para que sea terapéutico y curativo el calor debe ser muy especial, que penetre en Io más profundo del ser humano».
Conocedor de que cada planta, hierba o árbol tiene propiedades calóricas y radiaciones diferentes sobre el cuerpo humano, debía encontrar una composición exacta.
En esta búsqueda profundizó en sus investigaciones hasta encontrar «el calor óptimo» para el organismo humano.
El Dr. Ito denominó este calor/energía «TOKANETSU» (energia nutritiva) capaz de dar fuerza vital a todas las células del cuerpo humano.
La capacidad de esta «Energía Nutritiva» está basada en la combinación de 4 elementos:
– Elemento mecánico (fricción/presión sobre la piel).
– Elemento químico (aroma y humo del incienso).
– Elemento calórico.
– Elemento radiación.(infrarrojos de la llama)
Si falla alguno de estos elementos el poder terapéutico disminuye considerablemente.
En ocasiones el Dr. Ito comparaba la energía del Thermie con la de aquellas personas dotadas para trasmitir el «Ki» con las manos.
-En 1929 completó su descubrimiento tal y como lo conocemos actualmente.
En abril de 1929 el profesor Miake de la Universidad de Tokio
denominó esta nueva terapia como ITO THERMIE (Ito, como apellido de su inventor, y Thermie, palabra de raíz griega que significa calor).
El Dr. Ito fue siempre un científico.
«Soy un científico no me gusta que mistifiquen mi invento… con la convicción de que la Thermie Terapia se divulgará sin propaganda, y que dentro de 1000 años será conocida en todo el mundo».
En un país como el Japón, donde abundan los aparatos médicos con una tecnología muy avanzada, esta sencilla terapia continúa en expansión dentro y fuera del país. Desde su invención (han pasado 95 años), el número de practicantes es ya superior a 120.000, e Ito thermie ocupa un lugar importante tanto en terapias familiares como en centros especializados.